Mi experiencia en harinas con y sin gluten

Muchas dietas están hechas por motivos de moda o se inspiran en factores externos al cuidado esencial del cuerpo. Estamos tan influenciados por nuestros deseos de inmediatez y la voluntad de querer ser algo diferente que nos llega de forma superficial lo que realmente tiene que importar a la hora de comenzar a aprender una alimentación nueva y verdadera.

Yo no soy celiaca y he incorporado en mi alimentación harinas de grano sin la necesidad de consumir gluten para satisfacer una forma o consistencia pero si experimenté la calidad de vitaminas y minerales en forma natural sin necesitar suplementos.
Al preparar alimentos por ejemplo con harinas de quinoa, trigo sarraceno o mijo, sentí un incremento de mi energía, facilitando la digestión. Comer una marraqueta hecha con estas harinas cambia el sabor y calidad de lo que uno esta por consumir.

Cuando uno se interesa por tener un cuerpo bonito y aliviado nos favorece mucho dejar de comer pan y comidas con gluten, la pancita muchas veces es resultado de comer muchas harinas refinadas.No siempre es fácil conseguir granos o cereales de calidad a la hora de querer hacer harina sin gluten, por eso les recomiendo Molinos de grano Alemanes de marca KOMO indispensables y necesarios, en ellos puedes preparar harinas frescas de cualquier grano no oleoso, como es el ARROZ, MAIZ, QUINOA o LEGUMBRES y ahora el muy conocido AMARANTO.

Produciendo harinas con estos molinos no perdemos las propiedades y podemos consumir alimentos frescos en nuestra propia casa en poco tiempo.